Presentación del libro: El libro negro: La crisis de Bankia y Las Cajas. Cómo falló el Banco de España a los ciudadanos. Autor: Ernesto Ekaizer

Madrid, 26 de noviembre de 2018.

Intervención de Salvador Climent Serrano.

En primer lugar, me gustaría agradecer a Ernesto por la invitación a la presentación de este magnífico libro.

Es un libro que debería leer todo el mundo, estamos en una sociedad cada vez más manipulada, y hacen falta libros como este.

Está escrito de forma objetiva, es riguroso, sin juicios de valor, justificando cada aportación que realiza, como si fuera un artículo científico. Además, valiente, no sé por qué, pero la mayoría de lo que trata el libro es tabú en la sociedad española. Y cuando se utiliza se hace de manera demagógica.

El libro pone luces sobre el acontecimiento económico más importante que se ha dado en España en toda la historia. Muestra de ello es que: 1) las cajas de ahorros que tenían una historia consolidada de casi 200 años y que representaban el 50% del mercado financiero español han desaparecido. 2) 23 de las 45 cajas que existían en 2009 han sido intervenidas por el FROB y nacionalizadas, además de cuatro bancos, el Banco de Valencia que pertenecía a Bancaja, el Banco Gallego que partencia NovaCaixaGalicia y el Banco Popular, junto al Pastor que pertenecía al Popular, en su conjunto representaban el 30% de los activos de las cajas y bancos españoles en 2010. El denominador común de las entidades de crédito nacionalizadas ha sido su mala gestión durante el tiempo que estaban intervenidas, y sobre todo la mala diligencia en la venta. 3) algunas de estas entidades nacionalizadas, junto con otras que han recibido ayudas públicas, se han utilizado para para instrumentar ayudas veladas, incluso rescates encubiertos a otros bancos y cajas de ahorros. En este caso surge la pregunta ¿por qué unas entidades se les interviene y otras se les da este trato de favor? Destaca el rescate encubierto de CaixaBank en 2013 por la compra del Banco de Valencia, otros son el Sabadell por la adquisición de la CAM, el BBVA por la compra de CatalunyaCaixa y de UNIM, e incluso el Santander por la compra del Popular, en este caso con el Sistema Único de Supervisión ya en marcha, lo que puede presagiar que el nuevo sistema de supervisión puede ir por los mismos derroteros que antes. 4) Tan sólo las entidades de crédito que representaban el 6.75% de los activos no han recibido ayudas de ningún tipo, ni se han visto obligadas a fusionarse para sobrevivir. 5) este contexto, estuvo cerca de provocar la intervención del Estado Español por la Unión Europea (UE). 6) todo ello motivado por una sucesión de medidas equivocadas o, porque han tenido la pasividad para no tomar decisiones que se deberían de haber tomado para frenar el incremento del crédito, que a su vez venía motivado por la burbuja inmobiliaria que sufrió España durante más de una década.

En cuanto a dinero, las entidades de crédito perdieron por la morosidad más de 250.000 millones de euros en la crisis, además de 18.000 millones que escondieron en las fusiones que pasaron directamente a minorar el patrimonio sin pasar por pérdidas, o lo que es lo mismo cerca del 30% del PIB español. El tipo de ingeniería contable utilizado en estas operaciones, y por qué se utilizaron, este libro lo describe muy bien.

Todo ello, con la complicidad de las empresas auditoras, en especial Deloitte y con el consentimiento de los que tenían que vigilar para que no se produjera esta situación, en especial el Banco de España, y no sus funcionarios, la CNMV, el Ministerio de Economía y el FROB, que en un principio consintieron la burbuja inmobiliaria y después erraron en las medidas propuestas. Además, con el Presidente del Gobierno presumiendo, en 2008, en foros internacionales de la solidez del sistema financiero español, lo que demostraba la falta de conocimiento de la situación real que se estaba produciendo.

Además, muchas veces no sólo con la actuación pasiva, sino en la toma de decisiones, presiones y otras artes a algunas cajas como Bankia, para que el sistema financiero y en especial estas cajas, tomaran los rumbos que se decidían en las instituciones gubernamentales y no en los consejos de administración de las cajas. Por otro lado, otros actores de la competencia, en lugar de ser presionados, eran ellos los pedían cabezas y fondos gratis, y el gobierno les complacía en los dos aspectos. De esta forma obtenían suculentos beneficios en las operaciones corporativas, para el año de la adquisición y los siguientes con reservas tácitas.

El libro también explica muy bien lo que coloquialmente denominaban las pepas, (provisiones específicas pendientes de asignación) instrumento impensable en una economía desarrollada y mucho menos que la idea partiera, o por lo menos lo permitiera, el supervisor. Y como estas provisiones anormales fueron diseñadas y consentidas por el Banco de España, y en el caso de Bankia consentidas en las cuentas por parte de la empresa auditora Deloitte.

Cosas curiosas que me han llamado la atención en la lectura del libro, es el curriculum y las actuaciones de Luis de Guindos a) fue el artífice de las cuotas participativas de la CAM, b) era el representante de Lehman Brothers, c) primero dependía jerárquicamente de Rato y después lo tenía a sus pies, y d) fue el artífice de los dos Decretos Ley que acabaron con Bankia, ¿y por qué dos en tan poco tiempo? ¿qué es? ¿qué con el primero no consiguió los objetivos perseguidos?

El núcleo del libro es el proceso judicial de Bankia, que hoy ha empezado. Lo narra de forma detalladísima, incluso incluye documentos que no están en el proceso judicial. Entra en detalles del proceso de constitución de Bankia, de la salida a bolsa, de las responsabilidades de la empresa auditora, Deloitte, las incongruencias en las declaraciones de su socio auditor en Bankia Sr. Francisco Celma. La intervención del Banco de España, por una parte, los peritos designados para realizar el informe por parte del Juzgado, inspectores Busquets y Sánchez, y el desempeño de los inspectores y por otra la actuación de sus superiores en los informes sobre Bankia. El papel de la CNMV y del Ministerio de Economía, y por supuesto de los gestores de Bankia

El nombre de un capitulo resume muy bien el proceso que hoy ha empezado “no son todos los que están ni están todos los que son”.

El libro entra a fondo en estos aspectos. Lo chocante, es que todo empezó gracias a un partido político que ya no existe, ya que, si no es por ese partido, nadie interpone demanda contra nadie. Lógico…, todos estaban involucrados, como se ha visto ya en las tarjetas blak, partidos políticos, sindicatos etc. Y por la sensatez y valentía de los peritos del Banco de España y de otros inspectores.

Otro dato importante, respecto a Bankia, es que los expertos independientes que cobraron para actualizar a valor razonable (valor de mercado) los activos y pasivos a 31 de diciembre de 2010, hayan salido de rositas, sin ninguna responsabilidad. Después de que apenas unos meses después aforaran unas minusvalías (menor valor de mercado) de más de 20.000 millones de euros. ¿Quién se equivocó?, ¿los expertos independientes (AFI y BDO) ?, o ¿el nuevo equipo directivo encabezado por el presidente Gorigolzari?, o ¿los dos? Posiblemente los dos.

Por último, decir que disfruté leyéndolo,

Animo a Ernesto a que siga con el estudio de la otra parte de la reestructuración que tampoco ha salido a la luz pública, la gestión y adjudicación por parte del FROB de las entidades de crédito nacionalizadas. Algunos casos son para enmarcar. El Banco de Valencia, cuando ya estaba gestionado por el FROB, aprobó, a petición de Juan Antonio Iturriaga, administrador del BdV por el FROB, en la junta general de 14 de mayo de 2012 una ampliación de capital por valor de 1.000 millones de euros con derecho de suscripción preferente para todos los accionistas, este acuerdo obtuvo el respaldo de la gran mayoría de pequeños accionistas. Sin embargo, a los seis meses, vende la entidad por un euro, y una vez anunciada la venta se realiza una ampliación exprés de capital suscrita sólo por el FROB y sin respetar el acuerdo de la junta general, ni el derecho preferente de suscripción de los antiguos accionistas de 4.500 millones de euros. Con esta ampliación el Banco de Valencia a efectos contables tenía un valor contable mínimo de más de 4.000 millones de euros. 2.244 millones de euros de fondos propios y hasta 2.058 millones de euros en activos fiscales, que el Banco de Valencia no tenía activados por no esperar los suficientes beneficios para poder realizarlos. Sin embargo, CaixaBank, sí que podía. Todo ello gestionado por el consultor Juan Antonio Iturriaga, que también gestiono para el FROB como administrador la CAM y Cajasur.

Otros casos a destacar son el ABANCA, que se adjudicó por 1.000 millones de euros, y el primer año de la nueva gestión obtuvo 1.000 millones de beneficios con los nuevos propietarios. Otro caso sería la compra de CatalunyaCaixa y UNIM por el BBVA, La CAM por el Sabadell y más reciente la adjudicación del Banco Popular al Banco Santander ya con el Sistema Único de Supervisión.

Reiterar la enhorabuena al autor, agradecerle la invitación y animarlo para que siga escribiendo libros como este.

El Populismo se expande

Noviembre 2018

El Populismo se expande

Hemos asistido en unos días a un desmadre en la justicia y en la política impropio de país desarrollado y con ciertas garantías.

Después de más de 20 años de jurisprudencia de que el impuesto sobre actos jurídicos documentado sobre las hipotecas lo debe de pagar el prestatario, dos de los tres jueces del tribunal supremo dictan una sentencia por la que el sujeto pasivo del impuesto, es decir el que tiene que pagarlo, es la entidad de crédito

Esta sentencia es bastante peculiar ya que en Artículo 8 del Real Decreto Legislativo 1/1993, de 24 de septiembre, por el que se aprueba el Texto refundido de la Ley del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados. Dice:

“Estará obligado al pago del Impuesto a título de contribuyente, y cualesquiera que sean las estipulaciones establecidas por las partes en contrario:

a) En las transmisiones de bienes y derechos de toda clase, el que los adquiere.

b) En los expedientes de dominio, las actas de notoriedad, las actas complementarias de documentos públicos y las certificaciones a que se refiere el artículo 206 de la Ley Hipotecaria, la persona que los promueva, y en los reconocimientos de dominio hechos a favor de persona determinada, ésta última.

c) En la constitución de derechos reales, aquél a cuyo favor se realice este acto.

d) En la constitución de préstamos de cualquier naturaleza, el prestatario.

e) En la constitución de fianzas, el acreedor afianzado.

f) En la constitución de arrendamientos, el arrendatario.

g) En la constitución de pensiones, el pensionista.

h) En la concesión administrativa, el concesionario; en los actos y contratos administrativos equiparados a la concesión, el beneficiario.”

Y el artículo 29 dice:

“Será sujeto pasivo el adquirente del bien o derecho y, en su defecto, las personas que insten o soliciten los documentos notariales, o aquellos en cuyo interés se expidan.”

 

Pero nosotros no somos jueces, pero parece claro que el que debe de pagar es el que pide el préstamo, pero de todos modos es la justicia la que debe de dirimir en estos casos.

En una situación un tanto peculiar, el Tribunal Supremo en Pleno, rectifica esta primera sentencia y vuelve a la jurisprudencia de los últimos años, eso si, de forma muy ajustada 15 a favor y 13 en contra.

Siendo esto importante, mi comentario no se centra sobre lo que el Tribunal Supremo decide, sino sobre los efectos que ha producido en caliente a las pocas horas en el Gobierno, que como salvador de los ciudadanos y en contra de los abusos del capitalismo decide a prisas corriendo emitir el R.D. Ley 17/2018,

En único articulo dice:

“Uno. Se modifica el artículo 29, que queda redactado como sigue:

«Será sujeto pasivo el adquirente del bien o derecho y, en su defecto, las personas que insten o soliciten los documentos notariales, o aquellos en cuyo interés se expidan.

Cuando se trate de escrituras de préstamo con garantía hipotecaria, se

considerará sujeto pasivo al prestamista».

Dos. Se añade un apartado 25 en el artículo 45.I.B) con la siguiente redacción:

«25. Las escrituras de préstamo con garantía hipotecaria en las que el prestatario sea alguna de las personas o entidades incluidas en la letra A) anterior.»”

Y sale el Gobierno en rueda de prensa diciendo que no se podía permitir que el impuesto lo pagaran los ciudadanos.

Bueno, pues yo pienso que los bancos como buenas almas caritativas y como están atravesando una etapa excelente con unas grandes ganancias y sin problemas, pagaran el impuesto mencionado y no los trasladaran vía otros costes, tipo de interés, comisiones etc., al cliente.  Y seguro que apremian al Presidente del Gobierno  a que se dé prisa para aprobar el nuevo impuesto a la banca, porque ya están ansiosos de poder pagarlo para ayudar a cuadrar las cuentas presupuestarias españolas.

En primer lugar y ahora sin ironía, los bancos son empresas y su fin es ganar dinero, ya que si no cumplen este primer fin no pueden subsistir y mueren. Además, no están atravesando su mejor momento y sus márgenes son muy ajustados. Por otro lado, sin el sistema financiero la economía de mercado no puede subsistir, se puede prescindir de cualquier otro sector, pero de las entidades de crédito no. Puede ser por eso que algunos partidos populistas-comunistas, les gustaría que desapareciera sistema financiero, para instaurar la economía planificada. Eso sí, para los otros, porque ellos sí que necesitan los bancos para pedir hipotecas que además, no cumplen con los criterios de sostenibilitat de las entidades de crédito, es decir el 80% del valor de tasación y que las cuotas a pagar no excedan el 35% de la renta disponible del prestatario, y que además sea trabajador fijo.

Por lo tanto, será el de siempre, el ciudadano el que pague el impuesto, eso si, de forma diferente a la actual.

Si en verdad el Sr. Presidente Sánchez, quiere que no sea el ciudadano el que pague el impuesto, lo tiene fácil, solo tiene que abolir este impuesto que se instauró en 1993, año en el que si no me falla la memoria, gobernaba el PSOE, que creo que es el mismo partido que ahora. Por lo tanto, menos populismo y menos demagogia y si quieren que el ciudadano no pague, que elimine el impuesto y no engañe a la gente.

Salvador Climent-Serrano